Mira los 5 alimentos que crees que adelgazan ¡pero engordan!
Que un alimento sea light o integral, no significa que no engorde. Es más, hay muchas comidas que en realidad atentan contra una alimentación saludable o te hacen sentir hinchada o retener líquidos.
Estos son algunos de los ejemplos más comunes:
Las galletitas de salvado: en general, en su elaboración, se utiliza más grasa que para las galletitas de agua tradicionales. La diferencia es que estas galletitas te aportan más fibra y una mayor sensación de saciedad… pero no son light. Por supuesto, nadie te dice que elimines los carbohidratos pero sí que los consumas con prudencia.
Las gaseosas light: está comprobado por estudios científicos que por cada lata de gaseosa light que consumes, aumenta el riesgo de sobrepeso a un 41 por ciento. No quiere decir que no puedas tomarte un vaso de gaseosa bien frío, pero no abuses. Tu principal medio de hidratación tiene que ser el agua.
El sushi: es verdad que sus ingredientes y su método de preparación es muy sano; sin embargo, en su conjunto, el sushi puede aportarte muchas calorías. Cada pieza puede aportarte entre 40 y 50 calorías pero, como es un poco difícil llevar el control y dejar de picotear, si te comés 20 piezas estás sumando 1000 calorías. Por eso, a la hora de comer sushi, elige las piezas que vas a comer y sírvelas en un platito. prepara un mix variado y fijate que no todas tus piezas tengan queso y, además, que tengan más salmón atún y vegetales en vez de arroz.
La lechuga: la vedette de todas las ensaladas puede causar aumento de la retención de líquidos en determinadas zonas, así como la proliferación de gases que te van a dar sensación de hinchazón y malestar. No le sucede a todas las personas pero sí a algunas. Así que si te sientes inflamada después de comer una ensaladita, echale la culpa a la lechuga. Cambiala por otra hoja verde como la espinaca que es riquísima y te aporta vitamina C y es una buena fuente de hierro.
Los alfajores de arroz: los nutricionistas, en realidad, no los recomiendan. Por más que estén hechos con galletas de arroz tienen grasas y azúcares como cualquier otra golosina. Es más, conviene comerse un turrón, si es que te tienta pasar por el kiosco. Lo ideal es elegir una fruta al momento de lo dulce. Puede que – en algunos casos- tenga más calorías que un alfajor de arroz -que teiene entre 100 y 170 calorías- pero tendrá menos grasas y más nutrientes.
