Mira lo que pasa cuando usas por mucho tiempo el mismo tapabocas
La farmacéutica española María García Alonso compartió un experimento en su cuenta de Instagram: un cultivo de tapabocas que muestra lo que pasa cuando las mascarillas no se lavan o se utiliza la misma durante días.
Todo comenzó después de que una amiga suya le preguntó sobre la posibilidad de enfermarse debido a las bacterias que los tapabocas acumulan cuando se utilizan durante más tiempo de lo recomendado (o en el caso de las mascarillas de tela, no se lavan).
“Ya tenemos los resultados en las placas de Agar Sangre. Han crecido staphylococcus, streptococcus, neiserias, bacillus que parecen ser contaminantes… está claro que debemos lavar las mascarillas, desinfectarlas de vez en cuando y cambiarlas si es posible con relativa frecuencia.
Las bacterias que aparecen no son patógenas por sí mismas, pero podrían convertirse en patógenas oportunistas si se ven muy aumentadas debido a que están creciendo en abundancia en las mascarillas húmedas con nuestro aliento”, compartió en un video en Instagram.
CÓMO LAVAR TU CUBREBOCAS SEGÚN LA OMS
La Organización Mundial de la Salud clasifica en dos tipos los cubrebocas: los cubrebocas higiénicos que utiliza cualquier persona que están hechos comúnmente de tela y las mascarillas médicas, que forman parte del equipo de protección individual (EPI) de los profesionales de la salud.
En el caso de los cubrebocas higiénicos de tela, la OMS recomienda cambiar y lavar una vez que estén humedecidos o que muestren suciedad visible.
La OMS propone dos formas de lavar los cubrebocas correctamente: utilizar agua caliente con jabón o detergente para ropa o bien, lavar a temperatura ambiente y dejarla hervir por un minuto para esterilizarla antes de volverla a usar.
Otro método de esterilización puede ser remojarla en cloro y volver a enjuagar perfectamente para eliminar todos sus residuos.