Durante uno de los entrenamientos en la pretemporada de los Navegantes del Magallanes, el alto mando del equipo establecía una conversación sobre incorporaciones y nombres a considerar. Roberto Ferrari, presidente de la junta administrativa en la “Nave Turca”, le decía a Carlos García que Luis Arráez está próximo a llegar al país y que “estaba loco por jugar”.

Quizás su nombre no era tan rimbombante como otros, pero sí se sabía sobre su talento ofensivo. Después de todo, venía de una temporada en las ligas menores con promedio de .347 con 67 anotadas y 66 remolcadas en los 114 encuentros que disputó en clase A fuerte con los Mellizos de Minnesota.

Pero era imposible de predecir que terminaría siendo uno de los peloteros más valiosos para Magallanes y uno de los más queridos de la fanaticada. “Le doy gracias a Dios por la oportunidad que me dio Magallanes”, explicó Luis Arráez vía telefónica. “Fue una gran temporada”.

En los 45 encuentros que disputó, dejó un astronómico promedio de .335, .382 de OBP, .827 de OPS y con 22 remolcadas que dieron varias victorias al conjunto carabobeño. “Trabajé mucho para tener esa temporada que dejé en Venezuela”, afirmó Arráez.

Dicho rendimiento lo convirtió en principal candidato para el Novato del Año, que se terminó quedando Carlos Tocci, por diferencia de 4 votos. “He escuchado a muchas personas que están molestas porque no gané el premio, pero no se pudo”, aseveró Arráez. “Tocci tuvo una gran temporada también y lo felicito porque es justo ganador”.

Pero más allá de eso, el camarero quedó satisfecho por su primera experiencia a tiempo completo en la LVBP, algo que espera repetir por mucho tiempo. “Me encanta jugar en Venezuela. Puedo estar con mi familia y una fanaticada que es asombrosa”, explicó. “Jugaría todas las temporada si Dios y Minnesota me lo permiten”.

Por eso, Arráez mandó un mensaje tranquilizador a esa amplia fanaticada de Magallanes que temen con no volverlo a ver. “Me siento muy cómodo jugando en mi país. Los Mellizos no me han dicho que no puedo regresar, y espero que no lo hagan, porque quiero ir todos los años”.

Brian Dozier puede ayudar a cumplir su sueño

Los Mellizos de Minnesota cuentan con un segunda base estelar y que ha tenido un rendimiento élite en las últimas dos temporadas de las Grandes Ligas.

Sin embargo, la posibilidad que Brian Dozier salga vía cambio sigue aumentado, algo que podría ayudar para que el sueño de Luis Arráez se cumpla más temprano. “La gerencia me dice que tienen planes conmigo y que siga trabajando mi físico”, dijo el joven. “Si a Dozier lo cambian, hay muchas posibilidades que pueda tomarme un ´cafecito´ en Grandes Ligas este año”.

Con esa motivación, el infielder trabaja arduamente en los Estados Unidos todos los aspectos. En la ofensiva sigue puliendo un talento que es innato y en el gimnasio para moldear su físico, la principal tarea que le dio el alto mando de su organización.