La risa, la mejor medicina para la cirugía cerebral
Neurocientíficos estadounidenses han descubierto una vía focal en el cerebro que al ser estimulada eléctricamente provoca una risa inmediata, seguida de una sensación de calma y felicidad, incluso durante una cirugía cerebral despierta, publicó el pasado diciembre la revista Journal of Clinical Investigation.
Los efectos de la estimulación se observaron en una paciente con epilepsia que se sometía a una monitorización para el diagnóstico de convulsiones. Estos resultados se aprovecharon también para completar una cirugía de cerebro con la paciente despierta, realizada dos días después.
Los neurocirujanos, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Emory, en Druid Hills (Atlanta), consideran que la técnica es una forma potencialmente transformadora de calmar a algunos pacientes durante la cirugía cerebral despierta, incluso para personas que no estén especialmente ansiosas.
Fuera del uso durante una cirugía despierta, comprender cómo funciona la estimulación del haz cingular también podría informar acerca de los esfuerzos para tratar mejor la depresión, los trastornos de ansiedad o el dolor crónico a través de la estimulación cerebral profunda, aseguran los expertos.
El autor principal del estudio, Jon Willie, explica que el área clave para la risa y la relajación se encuentra en la parte superior y frontal del haz del cíngulo, el cual está situado debajo de la corteza y es un objetivo lógico debido a sus muchas conexiones entre regiones cerebrales que coordinan respuestas emocionales complejas.
Willie afirma que las ubicaciones de la colocación inicial de los electrodos se eligieron para registrar la actividad cerebral y localizar el inicio de las convulsiones de la paciente, cuya estimulación del paquete del cíngulo provocó de inmediato un comportamiento alegre, como sonreír y contar experiencias emocionales positivas.
En ese sentido, los investigadores visualizan que la estimulación del haz de cíngulo es potencialmente aplicable a la cirugía para tumores cerebrales, así como a la epilepsia.
