Isnotú: Centro espiritual de Los Andes
A escasos 15 kilómetros de la urbe valerana, pasando por la ruta de Sabana Libre de Escuque, se halla el poblado de Isnotú, capital del municipio Rafael Rangel en el Suroeste del estado Trujillo, el cual es conocido a escala nacional y mundial, por ser el lugar de natalicio del doctor José Gregorio Hernández.
Isnotú no se caracteriza por ser de calles grandes ni de enormes casas, -a pesar de estar muy carca de Valera, la ciudad más desarrollada del estado,- por lo contrario, es una localidad pequeña, con rasgos permanentes de las zonas típicas ubicadas en la región andina, donde destaca la cordialidad de su población.
Con un tiempo climático caluroso, cuyo promedio supera los 32 grados centígrados, Isnotú tiene como principal atractivo el Parque Espiritual, ubicado en la calle principal del pueblo el cual apenas supera la cifra de 11 mil habitantes.
Según refiere Aglevis Suárez, vocero del Gobierno de Calle en la parroquia José Gregorio Hernández, este es el punto de encuentro de quienes llegan a Isnotú, bien sea a pedir un favor a “El Venerable” o para agradecerle algún gesto milagroso, solicitado anteriormente.
“Es común observar a miles de feligreses en nuestro Parque Espiritual durante todo el año, pero ese sentimiento crece en octubre, cuando se celebra anualmente, el natalicio de nuestro ‘Siervo de Dios’”, añadió.
Según las cifras ofrecidas por Nexy Carrizo, Prefecta de la parroquia José Gregorio Hernández, el año pasado, durante la celebración de los 150 años del natalicio del también conocido como “El médico de los pobres”, hubo más de 200 mil visitantes, en las actividades realizadas entre el 24 y el 26 de octubre.
Apuntó que este año es difícil superar esta meta, por cuanto el día central, -26 de octubre, fecha del nacimiento de Hernández-, es un lunes y esto obstaculiza la movilización de personas provenientes de otras latitudes del país.
Además del Parque Espiritual, otros sitios de interés de Isnotú, son el Santuario del Niño Jesús, los Trapiches de Panela y el Parador Turístico Artesanal, “José Gregorio Hernández ‘El Negro’”.
Las tradiciones autóctonas de las regiones andinas ubicadas también en el Táchira y en Mérida, sobreviven en Isnotú, por cuanto es común observar pequeños locales comerciales, donde manufacturan las muñecas de trapo, así como productos de alfarería como budares, ollas, jarrones y tejas artesanales.
Adicional a ello, en Isnotú, los lugareños también exhiben habilidades en cuanto a la elaboración de vitrales y de artesanías en bambú y en madera.
Para la atención de los visitantes, la Corporación Trujillana de Turismo, organiza cotidianamente, talleres de sensibilización y atención turística dirigidas a los prestadores turísticos de Isnotú, para que brinden un servicio de óptima calidad a quienes llegan de otras zonas.
Actualmente, el pueblo cuenta con una capacidad aproximada de 500 plaza- camas, distribuidas entre las cerca de 20 posadas y micro posadas ubicadas en Isnotú, dijo la presidenta de Corpoturismo Trujillo, Carmen Beatriz Alviárez.
En cuanto a la gastronomía, los turistas podrán degustar los tradicionales pastelitos andinos, los cuales son similares a las empanadas, -aunque la masa se prepara con harina de trigo-, y son rellenas con carne molida y otras con queso blanco.