Islandia aplicó el mismo plan de la Eurocopa
Islandia tenía claro su plan. Ya lo hizo en la Eurocopa y lo volvió a repetir en su debut en el Mundial. Había que defenderse con orden y tratar de aprovechar las ocasiones que tuviese. Quién tuviera el balón era lo de menos. Y le salió a la perfección. Con apenas un 27% de posesión, los de Hallgrimsson sumaron un valioso punto.
Si esa estadística es apabullante, la de pases lo es aún mayor. Los islandeses apostaron por un juego directo, con balones largos y pocas combinaciones yapenas realizaron, según FIFA, 190 pases en todo el encuentro, menos de dos por minuto, de los que 125 (menos de un 66%) tuvieron acierto. Argentina, por su parte, tuvo una posesión estéril. Dio 722 pases, 655 de ellos con acierto (90%), pero no le sirvió para empezar el Mundial ganando.
Los de Sampaoli tuvieron el balón en sus pies durante 45 minutos de juego real, por sólo 17 de los islandeses. Mascherano, con 133 pases, batió el récord individual en este aspecto de un Mundial desde 1966, superando los 132 de Verón ante Grecia en 2010.
Otras estadísticas también evidenciaron la diferencia de planteamiento entre ambos equipos. Islandia realizó 35 despejes por los 18 de Argentina, que sacó 10 de los 12 córners que hubo en el encuentro. En remates, también los de Sampaoli ganaron claramente (26 contra nueve), pero les faltó puntería. Sólo Messi, 11 veces, remató más que todos los jugadores islandeses.
En faltas, eso sí, no hubo tanta diferencia, con 15 de los europeos y 10 por los sudamericanos. Lo curioso es que ninguno de los dos equipos cayó en fuera de juego.slandia tenía claro su plan.
Ya lo hizo en la Eurocopa y lo volvió a repetir en su debut en el Mundial. Había que defenderse con orden y tratar de aprovechar las ocasiones que tuviese. Quién tuviera el balón era lo de menos. Y le salió a la perfección. Con apenas un 27% de posesión, los de Hallgrimsson sumaron un valioso punto.
Si esa estadística es apabullante, la de pases lo es aún mayor. Los islandeses apostaron por un juego directo, con balones largos y pocas combinaciones yapenas realizaron, según FIFA, 190 pases en todo el encuentro, menos de dos por minuto, de los que 125 (menos de un 66%) tuvieron acierto.
Argentina, por su parte, tuvo una posesión estéril. Dio 722 pases, 655 de ellos con acierto (90%), pero no le sirvió para empezar el Mundial ganando. Los de Sampaoli tuvieron el balón en sus pies durante 45 minutos de juego real, por sólo 17 de los islandeses. Mascherano, con 133 pases, batió el récord individual en este aspecto de un Mundial desde 1966, superando los 132 de Verón ante Grecia en 2010.
Otras estadísticas también evidenciaron la diferencia de planteamiento entre ambos equipos. Islandia realizó 35 despejes por los 18 de Argentina, que sacó 10 de los 12 córners que hubo en el encuentro. En remates, también los de Sampaoli ganaron claramente (26 contra nueve), pero les faltó puntería. Sólo Messi, 11 veces, remató más que todos los jugadores islandeses. En faltas, eso sí, no hubo tanta diferencia, con 15 de los europeos y 10 por los sudamericanos. Lo curioso es que ninguno de los dos equipos cayó en fuera de juego.
slandia tenía claro su plan. Ya lo hizo en la Eurocopa y lo volvió a repetir en su debut en el Mundial. Había que defenderse con orden y tratar de aprovechar las ocasiones que tuviese. Quién tuviera el balón era lo de menos. Y le salió a la perfección. Con apenas un 27% de posesión, los de Hallgrimsson sumaron un valioso punto.
Si esa estadística es apabullante, la de pases lo es aún mayor. Los islandeses apostaron por un juego directo, con balones largos y pocas combinaciones yapenas realizaron, según FIFA, 190 pases en todo el encuentro, menos de dos por minuto, de los que 125 (menos de un 66%) tuvieron acierto. Argentina, por su parte, tuvo una posesión estéril. Dio 722 pases, 655 de ellos con acierto (90%), pero no le sirvió para empezar el Mundial ganando.
Los de Sampaoli tuvieron el balón en sus pies durante 45 minutos de juego real, por sólo 17 de los islandeses. Mascherano, con 133 pases, batió el récord individual en este aspecto de un Mundial desde 1966, superando los 132 de Verón ante Grecia en 2010.
Otras estadísticas también evidenciaron la diferencia de planteamiento entre ambos equipos. Islandia realizó 35 despejes por los 18 de Argentina, que sacó 10 de los 12 córners que hubo en el encuentro.
En remates, también los de Sampaoli ganaron claramente (26 contra nueve), pero les faltó puntería. Sólo Messi, 11 veces, remató más que todos los jugadores islandeses. En faltas, eso sí, no hubo tanta diferencia, con 15 de los europeos y 10 por los sudamericanos. Lo curioso es que ninguno de los dos equipos cayó en fuera de juego.