Hacker desempleado roba su propio banco para comprarse un BMW
uando llevas un tiempo sin empleo y consigues una cantidad considerable de dinero… ¿En qué lo inviertes? Seguramente lo último que harías sería comprar un BMW, un Range Rover, y hacerte unos tatuajes en la cara y el cuello. Especialmente si ese dinero lo has robado y no quieres llamar la atención…
James Ejankowski, de 24 años, es un británico desempleado con conocimientos de hacker, que descubrió un fallo en el software que usaba su banco para gestionar sus fondos. Cuando realizaba una transferencia de fondos desde su cuenta corriente a una cuenta especial de ahorro, entre las doce de noche y la una de la mañana, podía transferir más fondos de los que en realidad tenía.
Aprovechándose de este bug consiguió robar durante cuatro semanas unas 135.000 libras (alrededor de 153.000 euros) que transfirió a una cuenta de su pareja.
Lejos de comportarse discretamente para no ser descubierto, con este dinero James Ejankowski pagó algunas deudas, le entregó una parte a varios familiares, a los que mintió para justificar cómo había conseguido el dinero, se compró un BMW y un Range Rover, y se pagó los tatuajes del cuello y la cara que se pueden ver en la foto de apertura.
El problema que tienen los bugs de este tipo es que tarde o temprano el banco descubre que no le salen las cuentas, y todas las operaciones son fácilmente rastreables. Como era de esperar, tras hackear el banco James Ejankowski fue descubierto y denunciado a la policía. Ya ha sido condenado a 16 meses de cárcel, que tendrá que cumplir porque ya tenía antecedentes por un delito de una venta online fraudulenta, en 2015.
El banco de Yorkshire ha conseguido recuperar unas 34.000 libras, pero el resto las da por perdidas. El bug en el software bancario ya ha sido corregido.