Hace 11 años EEUU recrudeció bloqueo económico contra Cuba
Este 5 de marzo se cumplen 11 años desde que el parlamento estadounidense decidió recrudecer el bloqueo económico y financiero contra Cuba con la aprobación de la Ley Helms Burton, normativa que fue firmada en 1996 por el entonces presidente norteamericano Bill Clinton.
Con dicha ley, el Congreso impide que un presidente estadounidense cambie las normas del embargo o lo elimine, también contempla sanciones a países que intenten emprender relaciones comerciales con Cuba.
La normativa fue otro paso para aislar a La Habana, ya que surgió con el objetivo de internacionalizar el bloqueo, con el fin de intimidar a los empresarios para que no inviertan en la isla.
El bloqueo, impuesto desde hace 55 años, le ha causado a Cuba pérdidas en más de 125.000 millones de dólares.
La ley
Se ordena su publicación el 1 de marzo de 1996. El 12 de marzo de ese año, el presidente de los Estados Unidos Bill Clinton firmó y puso en vigor la llamada Ley de la Libertad Cubana y Solidaridad Democrática, más conocida por los nombres de sus principales promotores, el senador por Carolina del Norte, Jesse Helms, y el representante por Illinois, Dan Burton.
Le ley se introdujo como consecuencia de un incidente sucedido un mes antes. El 24 de febrero de 1996, cuando un MiG-29 y un MiG-23,aviones de guerra del Gobierno Cubano derribaron dos aviones privados desarmados1 operados por pilotos norteamericanos de origen cubano, "Hermanos al rescate".2 mientras volaban en espacio aéreo internacional. Esta organización de cubanos emigrados dice dedicarse a localizar a balseros cubanos para ayudarles a salvar la vida, aunque desde el gobierno cubano ha sido acusada de dedicarse a acciones de espionaje, sabotaje y propaganda antirrevolucionaria. De hecho, uno de los pilotos de la organización había participado en la invasión de Bahía de Cochinos y en acciones desestabilizadoras de la CIA.3
La ley establece que cualquier compañía no norteamericana que tiene tratos con Cuba puede ser sometida a represalias legales, y que los dirigentes de la compañía pueden ver prohibida su entrada en Estados Unidos. Esto significaba que compañías internacionales debían elegir entre comerciar con Cuba o comerciar con los Estados Unidos, que son un mercado muchísimo mayor.
Los detractores de esta ley aducen que desde el punto de vista político, pretende perpetuar el clima de hostilidad en la política de los Estados Unidos hacia Cuba, para forzar la destrucción de la Revolución Cubana, y, desde el punto de vista económico, intimidar por todos los medios posibles a los empresarios extranjeros para tratar de evitar las inversiones y el comercio internacional con Cuba.