El balompié también extrañará a Galeano
Este lunes uno de los escritores más importantes de América Latina, Eduardo Galeano, falleció tras ser víctima de un cáncer y han sido innumerables las muestras de afecto y pesar por su partida y eso también incluye al mundo del fútbol, uno que no le era ajeno, en el que se reconocía fanático y hasta quiso ser futbolistas, pero las letras lo llevaron a su verdadero destino.
"La tecnocracia del deporte profesional ha ido imponiendo un fútbol de pura velocidad y mucha fuerza, que renuncia a la alegría, atrofia la fantasía y prohíbe la osadía. Por suerte todavía aparece en las canchas, aunque sea muy de vez en cuando, algún descarado carasucia que sale del libreto y comete el disparate de gambetear a todo el equipo rival, y al juez, y al público de las tribunas, por el puro goce del cuerpo que se lanza a la prohibida aventura de la libertad".
En ese párrafo se esconde la esencia del pensamiento político-futbolero de Eduardo Galeano, según reseña el periodista argentino Julián Iglesias quien acota otras palabras poderosas en referencia a lo que era el pensamiento futbolero de Galeano: "el deporte como industria de la masividad y la pelota como elemento liberador. Los lazos siempre presentes entre la redonda y los que dicen cómo debe girar el mundo".
Galeano quiso ser futbolista pero jugaba muy mal así que se fue por las letras. Hasta este día el periodista y escritor, publicó 42 libros, y uno que estaría por salir.
El uruguayo nunca dejó de pensar en la pelota y alguna vez dijo que era hincha de Diego Maradona o como describe Iglesias: "de cualquiera que se animara a salirse un poco del libreto del deporte industrializado de estos tiempos".
Esa pasión por el fútbol se tradujo en escritos importantes como "Su majestad, el fútbol", una selección de reflexiones futboleras de autores como Albert Camus y Mario Benedetti y en 1995 llegó "El fútbol a sol y sombra".
El uruguayo consideraba al fútbol como "la única religión sin ateos" y este deporte para él sigue siendo la pasión popular más importante del mundo.
Él era tan genial que se atrevió a inventar una teoría de Messi en una entrevista realizada por la periodista Diana Fernández Irusta para el diario argentino La Nación donde afirmó que "ver jugar a Messi da placer".
"Incluso inventé una teoría, que se la hice llegar a él a través del director técnico de la selección. Así como Maradona lleva la pelota atada al pie, Messi lleva la pelota dentro del pie. Lo cual es un fenómeno físico. Inverosímil", contó entre risas.
"Científicamente es imposible, ¡pero es la verdad!", dijo durante ese diálogo en 2013.
Años antes, al hablar sobre Maradona, dijo: "Se convirtió en una especie de Dios sucio, el más humano de los dioses, eso explica la veneración universal que él conquistó más que ningún otro jugador".
Se fue un gigante de las letras y del fútbol, el más grande de los hinchas, pero sus escritos lo mantendrán con vida y en cada gol incrustado en las redes de tierras celestes, tendrá un pedazo de dedicatoria para él.
