Decepción en el imperio
En menos de treinta días el imperio acaba de reconocer su decepción y frustración. ¡Hay que ver la cara del asunto! Para que un imperio declare lo que ha dicho la Roberta Jacobson
En menos de treinta días el imperio acaba de reconocer su decepción y frustración. ¡Hay que ver la cara del asunto! Para que un imperio declare lo que ha dicho la Roberta Jacobson. Estados Unidos tiene unos cuantos meses lanzando misiles mediáticos y de otro tenor contra Venezuela. Circunspectos voceros del Pentágono han participado en esta perversa obra de intervención. Representantes latinos del Congreso gringo se enfilaron hace rato en la línea injerencista.
Las palabras de los imperios eran órdenes irrebatibles, en esto la historia es aleccionadora. El vasallaje, el latrocinio, el saqueo, han sido superados -no del todo. Los supraestados en sus apetencias siempre exigen que la cabeza del enemigo les sea entregada en bandeja de plata. Estados Unidos creyó dos cosas: una, que América Latina se chorrearía, y dos, que entregaría nuestra cabeza en la apetecida bandeja.
Los voceros gringos llegaron a decir que “la situación de Venezuela estaría resuelta antes de la fecha de la Cumbre de la Américas”. ¡O sea ya! Que Estados Unidos le ha puesto, es cierto; que le ha echado, es cierto. Que ha invertido inmensas sumas a través de la Usaid, la NED y otras organizaciones ultraconservadoras y de derecha y que defensoras de los derechos humanos, es altamente comprobable por documentos desclasificados ya o sin desclasificar.
Los propios involucrados en la tentativa intervencionista de aquí y del extranjero, sean de la CIA -como brazo ejecutor del Gobierno gringo-, de los sectores más recalcitrantes de la MUD, las viudas del puntofijismo, los que militan con el PP español, con los autoexiliados en Miami, Panamá, Perú y etcétera, lo dicen libremente sin necesidad de tortura. La situación es tan peculiar que lo gritan a los cuatro vientos: “Hay que salir de Maduro y del chavismo en forma definitiva”.
Ahora tienen el tema que Venezuela no debe ser la protagonista en la Cumbre de las Américas y que “no permitirán que nuestro país haga un show”. Pero el país no solo ya ha recogido 8 millones de firmas contra el decreto ejecutivo de Obama, sino que todos los organismos de integración de la región han dado un espaldarazo a la patria de Bolívar condenando el injerencismo y la afrenta estadounidense. ¡Todos a firmar y a defender la patria!
Asalia Venegas S.
Profesora UCV
/N.A
