Bolivia sustenta derechos de la Madre Tierra
Iniciamos los festejos la víspera con nuestra participación en el Congreso de Comunidades de Pueblos Originarios de Rusia, aseguró la embajadora del país suramericano, María Luisa Ramos, quien expuso en ese foro la experiencia de Bolivia en defensa de los derechos de los indígenas
La presencia boliviana en la Feria Tesoros del Norte, en el Día Internacional de la Madre Tierra, atrae este miércoles a los visitantes a la Exposición Permanente de Adelantos de Ciencia y Tecnología de Rusia (BDNJ, en ruso).
Iniciamos los festejos la víspera con nuestra participación en el Congreso de Comunidades de Pueblos Originarios de Rusia, aseguró la embajadora del país suramericano, María Luisa Ramos, quien expuso en ese foro la experiencia de Bolivia en defensa de los derechos de los indígenas.
En declaraciones a Prensa Latina a propósito de esta efeméride promovida por Naciones Unidas, la diplomática recordó que Bolivia proclamó el reconocimiento de los derechos de la Madre Tierra en calidad de deberes y obligaciones del Estado Plurinacional y la sociedad por medio de la Ley 071.
Indicó que esa norma garantiza el respeto al derecho a la vida, el agua, el aire puro, el equilibrio y a vivir sin contaminaciones.
Como a la Madre Tierra (Pachamama) se le tiene que respetar y cuidar, es necesario también garantizar su derecho a la renovación, subrayó Ramos.
La experta en temas ambientales recordó que la humanidad se encuentra amenazada por la extracción excesiva del beneficio de los recursos naturales mediante la aplicación de la denominada "economía verde", que busca el máximo provecho de todo, incluidos los derechos de la Madre Tierra, la cual debe ser protegida y conservada.
Al referirse al cambio climático, la embajadora alertó sobre la influencia nefasta que ejerce sobre la Tierra, y recalcó que es la respuesta a la crisis socioeconómica, política, alimentaria, energética y ecológica provocada por el sistema capitalista.
Si negamos estos hechos, llegaremos a una mayor confusión y tomaremos decisiones incorrectas en el camino de la erradicación de este problema de vital importancia para la humanidad, señaló enfática.
Reiteró que se trata de salvar a la Madre Tierra de las influencias del cambio climático y de la creación de un espacio donde las personas vivan en armonía entre ellas, así como con todos los seres vivos junto a quienes cohabitan este planeta y están dotados de derechos no menores que los de los humanos.
Los presidentes de los países y los organismos internacionales realizan esfuerzos en defensa de los derechos de la Madre Tierra, pero lamentablemente, hasta ahora no son suficientes, deploró Ramos.
En un día como hoy, Bolivia llama a la reflexión para aportar y contribuir en defensa de los derechos de la Pachamama, que en consecuencia son nuestras propias aspiraciones de vivir en armonía y respeto, concluyó la embajadora de la nación latinoamericana.
Mediante la Resolución A/RES/63/278 de la Organización de Naciones Unidas, fue reconocido por unanimidad en la Asamblea General de ese foro multilateral el 22 de abril como el Día Internacional de la Madre Tierra.
/N.A
