Atracciones turísticas se rebelan contra Pokémon Go
Apenas un día después del estreno de la aplicación Pokémon Go en Japónlos operadores de algunas de las atracciones turísticas más populares del país han comenzado a instar a sus visitantes a que lo jueguen con cautela o se abstengan de usarlo en las instalaciones.
Restricciones. El más tajante ha sido el santuario de Izumo, considerado el segundo más sagrado de Japón, donde desde ayer se prohíbe el uso de Pokémon Go en el recinto, tal y como indica su página web.
Sus razones. Las autoridades del santuario, situado en la prefectura de Shimane (oeste de Japón), argumentan que esta prohibición responde a la necesidad de preservar la atmósfera "solemne" del lugar y a garantizar la seguridad de sus seis millones de visitantes anuales.
Recomendaciones. Por su parte, el castillo de Himeji, la fortificación feudal más famosa y mejor conservada del país, ha colocado señales en el interior y los alrededores pidiendo al público que no juegue mientras camina por el complejo.
Cuidan a visitantes. Responsables de este castillo del oeste nipón designado como Patrimonio Mundial por la UNESCO han detallado a la cadena de radiotelevisión pública NHK que el lugar está lleno de escalones y zonas cuyo acceso está restringido por su peligrosidad, como los puntos cercanos a los fosos que rodean Himeji.
Descontento. Voluntarios del Parque de la Paz de la ciudad Hiroshima, lugar que rinde homenaje a las víctimas de la bomba atómica que devastó el lugar en 1945, también han expresado en medios de comunicación japoneses su descontento con la posibilidad de que un lugar teñido de dolor y pensado para la reflexión se llene de gente jugando.
Solo piden cuidarse. Por su parte, la torre Skytree de Tokio ha empleado un tono más moderado y simplemente ha pedido "precaución al jugar", ya que la gigantesca estructura es uno de los "gimnasios" donde los jugadores de "Pokemon GO" pueden hacer competir a los pokémons que encuentran y el operador de la misma espera poder atraer así más público.
Llegó a Japón. La expectación en Japón por el estreno de este juego para smartphones basado en una conocida franquicia japonesa incluso ha obligado al Gobierno a lanzar una campaña para el uso seguro del juego, tras los múltiples casos de lesiones o de allanamiento que involucraban a usuarios y que se han reportado en otros países.