Política

Declaratoria de abandono de cargo es la nueva estrategia de la agenda de guerra

“Utilizar la vía del Parlamento para dar un golpe de Estado puedo valer en Argentina, Paraguay, donde la constitución lo permite, pero aquí no, aquí no se permite que la Asamblea destituya al Presidente de la República.”

La declaratoria de abandono de cargo de Nicolás Maduro en la Presidencia de la República, aprobada por el bloque opositor en la Asamblea Nacional, no solo es una acción inconstitucional sino además una locura, aseguró el vicepresidente para el Socialismo Territorial, Aristóbulo Istúriz.

“Utilizar la vía del Parlamento para dar un golpe de Estado puedo valer en Argentina, Paraguay, donde la constitución lo permite, pero aquí no, aquí no se permite que la Asamblea destituya al Presidente de la República.”

Durante el programa Dando y Dando Radio, que transmite RNV Informativa, Istúriz, en compañía de la ministra para la Mujer e Igualdad de Género, Blanca Eekhout, señaló que no existen basamentos legales que justifiquen esta acción, como se refiere en el comunicado emitido por el Tribunal Supremo de Justicia.

En el texto, el máximo órgano judicial, exhortó al Parlamento nacional a abstenerse de adoptar decisiones que están fuera de las atribuciones de la Constitución de la República y recordó que el poder legislativo se encuentra en desacato al desconocer las sentencias número 260, de fecha 30 de diciembre de 2015, y número 1 del 11 de enero de 2016, emanadas por la Sala Electoral del TSJ, sobre los candidatos electos el 6 de diciembre de 2015 por el estado Amazonas.

A juicio de Eekhout la propuesta, impulsada por el bloque de la Unidad, forma parte de la agenda de guerra y de la trampa del imperio para declarar a Venezuela país forajido de cara a una intervención militar.

Apuntó que este empeño irracional en la guerra y la violencia, tiene asidero en el espacio geopolítico mundial donde el negocio de la guerra permanente garantiza no sólo “nuevos regímenes sino conflictos permanentes como el de Irak, Afganistán, Libia y Siria. El conflicto permanente implica destruir los estados nación y tener el control sobre los recursos de esos países.”

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