Los Estados miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), siguen con atención y preocupación las recientes denuncias del presidente de la República de Colombia, Gustavo Petro, en torno a un posible golpe de Estado e intento de magnicidio en esa hermana nación.
A lo largo de este año, América Latina y el Caribe han sido escenario de innumerables intentos de desestabilización, a través de ataques continuos a la institucionalidad de varios países y amenazas directas en contra de dirigentes populares y líderes políticos, democráticamente electos.
Sería un acto de notable ingenuidad considerar que estos eventos constituyen casos aislados o inconexos, por lo que el ALBA-TCP alerta a la comunidad internacional sobre la ejecución de una estrategia planificada e inducida, coordinada por poderes fácticos, tanto externos como internos, con el objetivo de perturbar la paz y la prosperidad de la región.
Desde el primer día de su mandato, la oligarquía que durante décadas gobernó Colombia, ha intentado acorralar al presidente Petro para evitar que lleve adelante su proyecto soberano y progresista de gobierno que busca alcanzar la paz y el desarrollo humano que tanto anhela y merece el pueblo colombiano. En este contexto, las denuncias hechas por el máximo mandatario de ese país, representan un riesgo latente e inminente para la democracia y la sociedad colombiana.
La Alianza Bolivariana continuará haciendo seguimiento de estas graves denuncias y confía en que el liderazgo del presidente Petro y la vocación democrática del pueblo profundo de Colombia, lograrán neutralizar cualquier amenaza a la paz y estabilidad de esta hermana nación.
El ALBA-TCP demanda que se respete la soberanía y no se interfiera en los asuntos internos de los pueblos latinoamericanos y caribeños y que cese esta nueva oleada de acciones coordinadas para provocar desestabilización política, económica y social en varios países de Nuestra América.
Fuente: VTV/ YVKE
