Comunicación en Shock
Mantenemos la hipótesis de que el 80% del peso de la derrota electoral del 6-D se le debe atribuir a la ineficaz y débil comunicación e información de la Revolución Bolivariana
Una vez logrados los objetivos tácticos definidos para el año 2015 (ganar las elecciones legislativas) la oposición fascista y la oligarquía parasitaria continúan profundizando la guerra psicológica (guerra económica) contra el pueblo.
El objetivo estratégico del fascismo y del imperialismo es derrocar al presidente Nicolás Maduro y acabar con cualquier atisbo de Revolución Bolivariana y del chavismo.
El lunes 14 de diciembre miembros de la Asociación Nacional de Supermercados y Afines (ANSA) amanecieron con algunos anaqueles abarrotados de comida para perros. ¿Es casualidad tan aberrante coincidencia? ¿Orden de los laboratorios de guerra psicológica?
Mantenemos la hipótesis de que el 80% del peso de la derrota electoral del 6-D se le debe atribuir a la ineficaz y débil comunicación e información de la Revolución Bolivariana.
A más de una semana de la derrota del 6-D la comunicación política de la Revolución se encuentra en “shock”; son tan graves las consecuencias de la política comunicacional que desde las filas del Polo Patriótico -paradójicamente- comienzan a negar a la guerra psicológica (guerra económica) como causa de la crisis.
Seguimos sin comunicar-nos con el país, toda nuestra estructura comunicacional está dirigida al chavismo.
Como consecuencia de esa mezcla –dialéctica- de guerra económica fascista y debilidad de la comunicación bolivariana, el chavismo abstencionista y un grueso sector de la población opositora se auto flagelaron al coincidir en el debilitamiento y derrota electoral de la Revolución.
Ahora el fascismo parlamentario intenta destruir el incipiente
Estado de Bienestar construido por la Revolución.