Sudáfrica experimenta la peor sequía desde 1997
Los agricultores ya están lidiando con pérdidas masivas de cosechas y el aumento de la deuda, reseñan medios locales de prensa
Los ciudadanos comunes pronto podrían enfrentar un doble golpe: la subida de precios de los alimentos y la escasez de agua potable, debido a la sequía que sufre hoy Sudáfrica, la peor desde 1997.
Los agricultores ya están lidiando con pérdidas masivas de cosechas y el aumento de la deuda, reseñan medios locales de prensa.
De acuerdo con cifras del Reserve Bank (Banco de la Reserva) SA, los agricultores deben a la entidad financiera alrededor de 117 mil millones de rands (al cambio actual un dólar estadounidense equivale a 13.80 rand).
Las provincias se sienten estos efectos, en especial North West, KwaZulu-Natal, Limpopo y Free State que han sido declaradas zonas de desastre.
Según los expertos, las condiciones de sequía, que son atribuibles al fenómeno climático de El Niño, provocaron que los rendimientos del maíz estén severamente afectados en las principales provincias productoras del cultivo, incluso han dado lugar a más importaciones de cereales.
Existe la preocupación de que la disminución de los rendimientos también podría conducir a incrementos en el precio de los alimentos básicos.
Un reporte especial de la cadena SABC refiere que de acuerdo con el Departamento de Asuntos Hídricos, las fuentes de agua locales, tales como represas han disminuido, mientras que los patrones de precipitaciones también bajaron.
Se estima que los niveles del líquido descendieron a menos del 10 por ciento en varios embalses en North West, entre ellos el Molatedi Dam, que abastece tanto a residentes en Sudáfrica como en Botswana.
El portavoz de la dependencia, Sputnik Ratau, advirtió que este es un reto que va más allá del cambio climático, más allá de la normal de la falta de lluvias en las últimas dos temporadas.
"Ahora nos enfrentamos también con el fenómeno de El Niño, que implica que habrá un impacto más negativo en nuestras precipitaciones", expresó.
El Servicio Meteorológico de Sudáfrica confirmó que este período de El Niño es el más grave desde la década de 1950.
Para el meteorólogo Paul Monare, las duras condiciones climáticas impulsadas por el período de El Niño apuntan a que en el verano habrá pocas posibilidades de lluvia.
Conocido como Oscilación del Sur El Niño (ENSO, por sus siglas en inglés), se refiere a un periódico calentamiento y enfriamiento del Océano Pacífico en los trópicos, que incide en gran parte de África, Medio Oriente, India, sureste asiático, Australia y América, regiones en las que vive la mitad de la población mundial.
Los científicos dicen que este fenómeno impulsa una marcada variabilidad en las precipitaciones, producción agropecuaria, ecosistemas y enfermedades en muchas partes del mundo.
Cuando El Niño está activo, sube la temperatura y se reducen las lluvias en algunas regiones, mientras que en otras ocurre todo lo contrario.
/N.A