¿Cambio táctico?
La guerra contemporánea ha redefinido el campo de batalla
La guerra contemporánea ha redefinido el campo de batalla. Por ejemplo, la guerra es mundial y permanente con variantes en cada país; el centro no está solo en el lugar donde los soldados se matan, sino en la complejidad de la guerra electrónica, cibernética, robótica, la acción terrorista de mercenarios, la acción desestabilizadora que crea caos, miedo, inseguridad, desabastecimiento… en la conversión de la vida cotidiana en un infierno, que destroce psicológicamente a las personas, que la vida sea desesperanza y desconfianza que mate la solidaridad y haga resurgir miedos antiguos y multiplique los presentes, cambiando todo por seguridad y protección mafiosa.
La guerra es por el control de nuestro territorio, riquezas y población. El campo de batalla es el cerebro y el alma de nuestro pueblo para imponer valores y prácticas. Las del mercado del capital o la cooperación solidaria de los pueblos.
La oposición venía poniendo el acento en la violencia guarimbera como proceso hacia un golpe de Estado, magnicidio, etc. Pero, la desestabilización permanente va dando resultados destruyendo valores solidarios e imponiendo valores que estimulan la “viveza” criolla para enriquecerse imponiendo el fraude a la nación. En Hinterlaces de mayo aparece la tendencia hacia un estado socio-emocional negativo.
La última movilización opositora (30-5-15) parece indicar una separación temporal de la violencia guarimbera e ir hacia las elecciones parlamentarias induciendo más escasez, carestía, devaluación del bolívar y, especialmente, más inseguridad y caos. Habrá que esperar más robos, atracos, secuestros, asesinatos, raterías, crímenes horrendos… Violencia cuya responsabilidad, se dirá, es del Gobierno y será combinada con movilizaciones “pacíficas”, huelgas de hambre… Su “paz” para derrocar al gobierno bolivariano.
La tendencia mostrada por Hinterlaces debe ser revertida con acciones y resultados concretos, contundentes. Ya no hay tiempo, no caben ofrecimientos. La batalla se va dando en el terreno de la paz, la seguridad ciudadana, la solución de los problemas económicos, la ética y la movilización permanente del pueblo bolivariano para orientar y conducir a sus hermanos, bien estén en el chavismo descontento o en la oposición. El estilo y el lenguaje serán claves, moderando el uso de los adjetivos, evitando el insulto, hablándole a todo el pueblo.
Embajador
/N.A