Merengues volvieron a dar un golpe sobre la mesa

En un día para festejar el Real Madrid sopló sus 116 velitas, en el hostil escenario del Parque de Los Príncipes, con un nuevo triunfo sobre el París Saint-Germain. Esta vez con marcador 1-2 gracias a los goles de Cristiano Ronaldo y Casemiro.

Zidane apostó por un 4-4-2 en la titular con Kovacic, figura en la primera parte, y Casemiro de doble pivote; Asensio y Lucas Vásquez por bandas; mientras que Karim Benzema acompañó a Cristiano en el frente de ataque. Emery apostó por mantener su 4-3-3 con la inclusión de Motta como volante tapón y a Di María en el lugar de lesionado Neymar.

Todo estaba servido para un partido de ida y vuelta por lo que proponían sus intérpretes. El Real Madrid mostró una cara compacta y solidaria en los primeros compases con Mateo Kovacic cubrió la espalda de Marcelo e interceptó siempre el primer pase que iba con destino al tridente ofensivo del equipo local.

La primera clara del partido la tuvo Sergio Ramos al conectar su pierna un pase filoso de Marco Asensio al minuto 17’, su remate fue repelido por el guardameta Areola. Los parisinos seguían sin inquietar el arco blanco, y la visita de a poco controlaba más los tiempos.

Al 37’ Karim Benzema tuvo en su pierna derecha terminar la serie, encaró al portero pero a su remate le faltó el olfato de un goleador. El balón fue raso y Areola despejó el peligro son su pierna. A partir de allí el PSG tomó un segundo aire y terminaría los primeros 45’ metiendo presión.

Primero fue Di María con un remate con pierna derecha que detuvo el cancerbero Keylor Navas al 41’, luego al minuto siguiente fue Kylian Mbappé quien con un potente remate a quema ropa obligó al costarricense a exigirse bajo palos.

Segundo tiempo de emociones

Consientes de que podían ser los últimos 45 minutos en competición europeas en esta temporada el PSG saltó a la cancha. Por la otra banda Salió un Real Madrid convencido de terminar de dar el golpe en la mesa que terminara la serie y apareció el hombre gol de este torneo.

Marcelo colocó un centro preciso que el portugués Cristiano Ronaldo conectó levemente desviado del segundo palo del portero al 49’. Sin embargo, dos minutos después Marco Asensio realizó una jugada individual frente a la marca de Dani Alves que habilitó a Lucas Vásquez. Este a su vez soltó un centro al corazón del área para que el dorsal ‘7’ blanco cabeceara en las alturas y ante el humo de las bengalas que prendieron los ultras.

Ronaldo selló su gol 12 en la presente edición de Champions y marcó por noveno partido seguido en Liga de Campeones contando la final de Cardiff.

Si no podía llegar una noticia peor para los locales estaban equivocados. Al 65’ Marco Verrati saldría expulsado por doble amarilla, el murmullo en las gradas era colosal y Zidane se frotaba las manos. Asensio mantuvo su versión revolucionadora y pegó otro poste ante la fría mirada de Areola.

Luego de un remate de Javier Pastore, el balón rebotó en Cavani para batir a Navas y el partido se colocaría 1-1 de manera transitoria. No obstante, Zidane empezó su juego con los cambios y le dio ingreso a un Toni Kroos que le devolvió la quietud que necesitaban los blancos.

Ya en el 80’ fue Casemiro el que contó con un poco de fortuna para cerrar la serie con un segundo gol. Su remate rebotó en Thiago Silva y batió al portero para dejar cifras definitivas en el marcador.

Nuevamente el equipo parisino se quedó muy lejos del objetivo principal que es alzar una orejona, y el Madrid dio un paso importante para seguir haciendo historia en la mejor competición de clubes del mundo.