Barbosa
El papá de Margot pasó el 24 y el 31 de diciembre en compañía de una mujer de Primero Justicia que se levantó en un diálogo en la tasca República Dominicana
¡ El pasado está aquí! Con el nombramiento de Barbosa en la presidencia de la Asamblea en desacato, dimos una muestra más de que no solo estamos en desacato, sino que también estamos en el pasado y dando lástima. Después de Espoleta Allup y Matemático Borges, ahora sí es verdad que demostramos al mundo que esa Asamblea no nos importa un carajo, porque con Barbosa ahí, el mensaje que estamos enviando es: se acabó lo que se daba. Así que tanto Espoleta Allup como Matemático Borges deben estar contentísimos, porque es imposible que Barbosa lo haga peor que ellos.
Lo peor de la vaina es que uno se la pasa ofreciendo futuro, y llegamos con Barbosa, que tiene un pasado que en Maracaibo no lo olvidan nunca, porque fueron muchos los que pasaron por los pozos de la muerte y eso no se olvida así, fácilmente. Y lo que preocupa es que el compañero Manuel –Saludos con los brazos– Rosales, se haya dejado imponer a Barbosa, porque todos decían que su candidato era Timoteo –Juguetes– Zambrano, y ni siquiera la compañera Delsa –Barriles– Solórzano entró en el marcador. Y es bueno decir que el compañero Rosales todavía no se repone del cacerolazo que le hicieron en Florida en Navidad y tristeza. “A mí no me llegó el pernil, pero me llegó un cacerolazo”, dijo Rosales en Miami adentro.
Lo bueno es que la presidencia de Barbosa puso a Timoteo –Juguetes– Zambrano a escribir, cuando todo el mundo sospechaba que no sabía hacerlo. El hombre se apareció con una carta abierta para todo público, donde renuncia al diálogo y se queda con el monólogo. Y hay que decirlo, porque todo el mundo lo sabe: nadie quiere hablar con Timoteo, sobre todo Espoleta Allup, y ellos saben por qué el perro entra a la iglesia. También el que está muy contento, a pesar de que todavía le duele mucho la derrota en Aragua, es Ismael –Talanquera– García, quien ahora llama al Capitolio El Bar Bosa. Y dice a gañote pelao, para que lo escuche todo el mundo subdesarrollado: “Ahora, en el Bar Bosa, la vida es más sabrosa”. Y Espoleta Allup se le queda viendo con una cara de motor fuera de borda. No somos serios, y así no llegamos a ninguna parte, y mucho menos a Miraflores, por eso la gente nos ha ido abandonando como se abandona un papel viejo, mi querido viejo.
El papá de Margot pasó el 24 y el 31 de diciembre en compañía de una mujer de Primero Justicia que se levantó en un diálogo en la tasca República Dominicana. Y ayer llegó contentísimo, puso sobre la mesa un pan de jamón y dijo: “Estoy feliz, estoy feliz, estoy tan feliz que hoy no le voy a meter su coñazo a la puerta”. Y se fue derechito al cuarto. Abrió la puerta, y en silencio, silbando la quinta sinfonía de Beethoven, la cerró.
—Un feliz año pa’ ti, un feliz año pa’ mí, –me canta Margot.