Mugre conceptual
¿Para qué infiltra el rrrÉgimen a violentos en marchas de oposición? ¿Para derrocarse a sí mismo?
Ante el desaseo conceptual de la oposición me permito amablemente algunos comentarios lógicos, o sea, higiénicos:
¿Por qué si los violentos de las guarimbas son chavistas infiltrados los dirigentes de oposición, antes de olvidarlos, piden su libertad apenas caen presos?
¿Para qué infiltra el rrrÉgimen a violentos en marchas de oposición? ¿Para derrocarse a sí mismo?
Ora los violentos son infiltrados, ora son estudiantes torturados apenas comienzan a cantar y finalmente los abandonan en la cárcel. Lorent Saleh, Jon Goicoechea, José Pérez Venta y otros que yo tampoco recuerdo.
Ora achacan fffRRRaudes al CNE, ora revalidan sus partidos ante él, ora promueven sus candidaturas.
Ora Nicolás Maduro abandonó el cargo, ora es un dictador, ora abandonan lo del abandono.
El Brasil, Colombia, México, Paraguay, el Perú, promueven la intervención de Venezuela. Países con un desempeño democrático precario, para no hablar de sus violaciones de los derechos humanos. Santos denuncia militarización de Venezuela con siete bases militares estadounidenses en su territorio.
Esos y otros países denuncian en la OEA un golpe de Estado en Venezuela mediante un golpe de Estado en la OEA, al sacar arbitrariamente a Bolivia de la Presidencia del Consejo Permanente.
Los terroristas dicen que luchan porque hay hambre —mediante la devastación de instituciones de alimentación.
En su violencia exigen elecciones generales ya ya ya y cuando Maduro dice que quiere elecciones, en una pataleta malcriada declaran que no quieren elecciones.
¿Cómo hablar con una persona que dice una cosa y la contraria en una sola respiración y sin pestañear?
¿A qué se debe desestructuración mental tanta? A las premisas. En computación hay un concepto llamado GIGO: Garbage in-garbage out, que podemos traducir como ‘basura entra-basura sale’. Si introducimos datos erróneos no esperemos que la computadora los componga y genere productos sanos. Jorge Luis Borges decía que los falsos problemas inspiran falsas soluciones. Si partimos de la falsa premisa de que vivimos en dictadura los demás razonamientos se van al garete, como un saco de canicas saltando escaleras abajo. Y si le añades emocionalidad el basurero es todavía más patético. Con razón padecen estupidez tanta.