Vinotinto sub-20 va por la revancha
Venezuela tendrá que demostrar que tiene la suficiente capacidad psicológica para levantarse de lo ocurrido en el partido pasado y enfrentarse esta noche a Uruguay, con la necesidad de una victoria para seguir con vida en el hexagonal final del Suramericano de Ecuador.
La derrota ante Brasil (1-0), en medio de una indignante actuación arbitral del peruano Diego Haro, dejó golpeada a una selección nacional que además de sumar su primera derrota en el torneo, perdió a piezas importantes para cumplir su misión de lograr los tres puntos ante la Celeste con la que empató sin goles en el inicio del Suramericano.
Heber García, Eduin Quero (ambos por roja directa, el primero durante los 90 minutos y el otro tras el partido) y Yangel Herrera (por acumulación de amarillas), no podrán estar hoy en el once de Rafael Dudamel, quien tampoco podrá estar al ser sancionado por las declaraciones ofrecidas en la rueda de prensa posterior al duelo con los brasileños. Vicente Rosales y José Quintero también fueron castigados.
Hasta último momento se esperará para saber si se levantará la decisión que pesa sobre jugadores y cuerpo técnico. El presidente de la FVF, Laureano, viajó ayer a Ecuador para intentar mediar en el tema.
Con Marco Mathías a la cabeza, la Vinotinto tendrá que hacer modificaciones obligadas para afrontar un partido vital en sus aspiraciones por llegar al Mundial de Corea del Norte que se jugará entre mayo y junio.
Para las bajas de Quero y Herrera, el cuerpo técnico ya tendría los reemplazos: José Hernández y Christian Rivas, quienes en este mismo certamen ya fueron utilizados ante Perú y Bolivia en la primera ronda. En esos partidos no pudieron estar Quero ni Herrera por sanciones.
De resto no debería haber mayores cambios en el once titular en el que destacan en la portería Wuilker Faríñez y en la parte ofensiva jugadores como Yeferson Soteldo y Ronaldo Peña, quien todavía no ha podido hacerse presente en el marcador en Ecuador. Hoy es una buena oportunidad para que termine de explotar el espigado delantero.
Uruguay llega a este encuentro sin la presión de tener que buscar un resultado al ser, de momento, la única clasificada para el Mundial. El combinado charrúa solo tiene en juego su invicto en la cita.