Tras sufrir un accidente joven sigue trabajando por una solidaria razón
Un joven afroamericano encontró en la Navidad su mejor motivación para ir a trabajar pese a que recién se estaba recuperando de un accidente. Él trabaja como empelado en una cadena de comida rápida en Estados Unidos. Su historia se divulgó en Facebook el pasado 8 de diciembre cuando un cliente acudió al establecimiento y lo vio trabajando con un collarín y un cabestrillo para el brazo.
Se trata de Jakeem Tyler, un joven estadounidense que hace unos días sufrió un accidente automovilístico que lo dejó mal herido. En su estado, lo lógico era que se tomará unas semanas de descanso médico para recuperarse por completo, pero el joven no quiso. Decidió seguir ateniendo en la sucursal de Chick-fil-A, en Avon, Indiana.
Un cliente de nombre Cameron Nelson capturó el momento y decidió compartirlo en Facebook. “Cuando pedí mi orden le pregunté qué había pasado… me contó que había estado involucrado en un accidente automovilístico, pero estaba trabajando porque necesitaba dinero y también quería dar comida en Navidad a la gente sin hogar, por eso necesitaba el dinero”, contó.
Esta versión fue confirmada por CBS News que conversó con los padres de Jakeem. Ellos confirmaron que su hijo apoya a un refugio de personas sin hogar en Indiana, proveyéndoles de comida y otros suministros. Por su parte, el lugar donde trabaja también elogio su espíritu solidario. "Jakeem es un joven extraordinario y un miembro del equipo excepcional. Él es una inspiración tanto en términos de su ética de trabajo y el compromiso de servir a los demás”, dijo la cadena Chick-fil-A en un comunicado.
Con el afán de ayudarlo –y que otras personas también lo hagan-, Cameron Nelson creó una página a través de la plataforma virtual GoFundMe, en donde hasta el momento ha recaudado cerca de 42 mil dólares.