La dimensión callejera del conflicto: siete claves
Capítulo "agitación y conducción de las rabias del pueblo". Si uno no tuviera un posgrado en eso, en lo que nos la pasamos toda nuestra maldita juventud, estaríamos sorprendidísimos de las "tácticas" usadas por los sifrinos. Más clarito: los ricos y sus jalabolas no nos van a enseñar a conspirar, en eso les metimos el chuzo en el siglo pasado y podemos seguir dándoles clases en este, apoyados en una generación de chavistas jóvenes y conocedores de la historia de las luchas del pueblo.
Por lo visto, entre los nuestros hay quien necesita alguna clave o llamado al centro del conflicto venezolano (que no es autóctono sino global) a estas alturas del campeonato. Van algunas:
1) Sí, el pueblo anda arrecho.
2) Sí, el pueblo está a punto de saquear a los comerciantes que lo roban o le esconden la comida; el pueblo está a punto de quitarle la comida y otros productos, a coñazos, a las mafias corporativas en alianza con las mafias policiales.
3) No, es mentira que los planes del pueblo sean movilizarse para ir a Miraflores y sacar de ahí a Nicolás. La manipulación, el "trabajo", del sifrinaje proempresarial, consiste en tratar de hacer ver que sí, que la gente está en la calle con ánimo de derrocamiento. Capitalizar las rabias de la gente y convertirla en vehículo para intentar un derrocamiento o desestabilización callejera extrema para hacer presión sobre el Gobierno.
4) No, es mentira que el anhelo máximo de nuestro pueblo sea quitar al Presidente y poner en su lugar a algún mamagüevo marca Capriles, Machado, López o Guevara.
5) Es mentira que el pueblo chavista no existe o que esté guardado en su casa. Cuando el sifrinaje y sus medios y tuiteros estrella hablen de "los colectivos", sepan que eso que nos quieren vender como un monstruo creado por el Gobierno es en realidad el pueblo chavista activado en su más alto nivel de organización callejera y de choque.
6) Si "los colectivos" son capaces de detener movilizaciones masivas, manipuladas o no, es una buena noticia para el chavismo: miren qué bien organizados estamos.
7) Si los partidos pro empresariales son capaces de desviar la energía popular desde su objetivo actual (las mafias de comerciantes que le quitan el sustento) hacia Miraflores (que no es el anhelo de la gente sino de un puñito de empresarios, estimulados y financiados desde el norte) es una mala noticia: si el pueblo se movilizara a favor de los empresarios que lo humilla y empobrece, estaremos en presencia de una aberración de nuestra historia. Empujemos entonces, cada quien para su lado. ¿Dudas acerca del bando al que perteneces? Favor consultar con tu origen, o con el bando al que te convoca tu conciencia social, política y de comprensión de la historia.
/N.A