Rusia y Europa lanzan misión para buscar vida en Marte
Los pasos para determinar si hay vida en Marte avanzan con el lanzamiento del cohete ruso Protón, que lleva a bordo el satélite Trace Gas Orbiter (TGO) y la sonda espacial Schiaparelli, realizado este lunes por la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Agencia Espacial Federal Rusa (Roscosmos).
La nave, que despegó del cosmódromo de Baikonur en Kazajistán, es parte de la misión denominada ExoMars 2016 y comprende un viaje que durará siete meses.
Roscosmos confirmó que la separación del cohete se completó sin problemas.
"Estamos camino a Marte. Excelente", dijo el director general de la ESA, Jan Woerner.
Se deberá esperar unas horas más para confirmar que la nave se encuentra en la órbita adecuada para viajar a Marte.
Para el 16 de octubre de este año, está previsto que el satélite se sitúe en la órbita del planeta rojo, con la finalidad de estudiar los gases de la atmósfera, a través de cuatro aparatos científicos. Lo que se busca es establecer la procedencia del metano que ha sido detectado en varias misiones de la NASA.
El dato: Los científicos estiman que el metano, que puede ser considerado una de las pruebas de vida en el planeta rojo, puede ser de origen tanto biológico como geológico, reseñó RT.
Por su parte, la sonda Schiaparelli está equipada con sensores para medir el viento, la humedad, la presión atmosférica y la temperatura cuando se pose en la superficie de Marte. Su misión principal será poner a prueba la tecnología de aterrizaje de la ESA, como paso previo al envío de un vehículo para excavar a dos metros bajo tierra que está previsto para 2018.
Dicha sonda espacial permanecerá operativa de dos a ocho días marcianos (el planeta rojo tarda 24 horas y 39 minutos en girar sobre su eje) y se convertirá en el cuarto aparato controlado que pise el suelo de Marte con éxito, tras todos las iniciativas anteriores de la NASA.
En contexto:
En 2003, la ESA y el Reino Unido llegaron a Marte con el Beagle, compañero de viaje de la sonda ExoMars, que está todavía operativa, con el que se perdió contacto al alcanzar la superficie.
Los científicos europeos y rusos llevan desde el año 2000 perfilando esta misión que se desarrollará en dos fases: la ExoMars 2016 y la ExoMars 2018.
El programa está dotado con más de mil 200 millones de euros en el que la industria aeroespacial española participa al 6,7 por ciento, reseñó EFE.
"ExoMars 2018 está realmente abriendo un nuevo capítulo en la exploración de Marte. Por primera vez se investigará no solo en superficie, sino también en profundidad. En las misiones anteriores solo se exploró a una profundidad de cinco centímetros y ahora excavaremos hasta dos metros. Esto es muy importante ya que nos dará una mejor oportunidad para encontrar posibles evidencias de si hubo vida en el planeta", explicó Jorge Vago, uno de los científicos de la AEU del proyecto ExoMars.